Las relaciones interpersonales han evolucionado hasta el uso imprescindible de las redes sociales o apps móviles a través de una interconexión a nivel financiero, comercial, laboral y humano. Todas caracterizadas por una instantaneidad y perfección presentes en el mercado actual. Sin embargo, el detonante del desarrollo fue el sector financiero, que comenzó experimentando la verdadera revolución enfocada en las transacciones de fondos a través del TARGET. Esta herramienta brindaba la posibilidad de traspasar fondos de manera instantánea y al mismo tiempo permitía controlar, gestionar y reducir costes de una forma ágil.
Sin embargo, en la recesión de 2008, que afectó gravemente al sector financiero, se pasó de la ausencia de liquidez al exceso de ésta, junto a una demanda escasa por la desconfianza de muchas PYMES que no pudieron proseguir por declararse insolventes. Este estrangulamiento de liquidez incitaba a la prudencia por parte de las empresas, por lo que se optó por abrir las puertas a otras fuentes de financiación y diversificar la forma en la que las compañías se financian, apareciendo así el crédito B2B en las empresas.
Actualmente son las plataformas desarrolladas a nivel Business to Business (B2B) la nueva solución financiera que complementan a la financiación bancaria. Esta forma de empréstito ofrece a la empresa otras alternativas de crédito, pudiéndose aplicar tanto para proveedores como clientes.
Las empresas Fintech, en este caso, ofrecen un servicio online donde abundan la agilidad, seguridad y la eficiencia en su objetivo. El modelo B2B da acceso a todos los usuarios para emplear estas plataformas y contar con recursos suficientes a fin de poder establecer una estructura que le permita dar soporte financiero a las empresas, a través del crédito comercial. Además, la tecnología blockchain y su aplicación al mundo de las criptomonedas proporciona varias medidas futuras indispensables para la financiación empresarial.
Estas fuentes alternativas de financiación deben de considerarse para diversificar las opciones de inversión ajena, fortaleciendo un marco empresarial caracterizado por la prudencia. Los proyectos empresariales son esenciales para un crecimiento y desarrollo pleno de la entidad, en los que una buena y sólida financiación es indispensable para la ejecución de éstos, tanto a nivel regional como global.
En este contexto, un gestor debe de aprovechar todas las oportunidades que se le presenten y no temer a que se produzca una nueva recesión, aprendiendo de los errores y generando una estrategia que permita mejorar la eficiencia de la gestión financiera con el fin de que la compañía crezca en el mercado.